viernes, 25 de diciembre de 2009

Desde el fondo del océano.

Desde el cielo alicaídos esplendores se dejan caer
como frutos del reencuentro y las ocaciones especiales
mientras las moscas que solían volar en mi habitación
zumban en mi oído y aterrizan en mis pies
siempre he querido vivir como una persona sana
con presiones divergentes
cantos tibios a la laguna
flores neutras a los pies del mar
gracias al inmenso sol que golpea mi cabeza
termino en las profundidades
media muerta/media viva
media dormida/media despierta
un pececito juega con mi pelo
mientras azul sensible bordea mi cuerpo
puedo construir una ciudad azul
puedo destruir todo lo que tengo
OH NO, soy tan sensible
cuidame, cuidame mucho
mis lágrimas podrían matar a cualquiera
cuidado con hacerme llorar
aunque en el fondo del océano se pierda mi llanto
y se transforme en azul
puede surgir un tsunami.

Estoy tan hundida y sola
sólo tengo a ese pez enrredado en mi pelo
en mi cabeza hay mucho más
flores rotas rotan en mis ojos
OH NO, mis pupilas son pétalos marchitos/secos.

Lana rosa me cubre y me hace un vestido
¿cómo es posible que nada se moje aquí abajo?
Me gusta peinar mi cabello con el tenedor de la Sirenita.

Cuidame, cuidame mucho.

Las paredes resecas caen sobre mi
la amargura espontánea de un momento nublado tiene la culpa
la agonia selecta de un orden continuo
todo se traspapela, busca una nueva forma
se vuelve intrepidamente emocional
a pesar de los tiempos tormentosos
y de la flacidez del alma
nunca moriría por amor.